Es sumamente preocupante y triste enterarse de otro homicidio ocurrido en el municipio de Montelíbano en menos de 24 horas, que se suma al asesinato de la señora Linda Flores Bello.
En esta ocasión, el ciudadano Camilo Andrés Estrada fue asesinado en el casco urbano, específicamente en un establecimiento público en el barrio 27 de julio durante la madrugada de este miércoles santo.
La violencia y los homicidios son situaciones que generan un profundo impacto en la comunidad, sembrando miedo, tristeza y desconcierto entre los habitantes de Montelíbano. La pérdida de vidas humanas de esta manera es una tragedia que enluta a las familias de las víctimas y que afecta la tranquilidad y la seguridad de la población.
Las autoridades locales deben actuar con prontitud y eficacia para esclarecer estos hechos, llevar a los responsables ante la justicia y garantizar la seguridad de los habitantes del municipio. Es fundamental que se investiguen a fondo las circunstancias de estos homicidios y se tomen medidas para prevenir la violencia y proteger a la comunidad.
Es necesario unir esfuerzos como sociedad para enfrentar la violencia, promover la paz y construir un entorno seguro y pacífico para todos los habitantes de la región.