Ever Padilla Acuña, quien falleció el domingo pasado en un accidente de tránsito en el Urabá Antioqueño, fue despedido de una manera muy poco usual, su cuerpo fue trasladado en una retroexcavadora en lugar de un carro fúnebre a peticion de amigos.
El sepelio se llevó a cabo el pasado miércoles en el corregimiento de Rabolargo, Cereté donde familiares y amigos se reunieron para darle el último adiós.
Durante el recorrido, la retroexcavadora, adornada con flores y cintas fúnebres, fue acompañada por una caravana de dolientes, convirtiéndose en una emotiva muestra de afecto y respeto hacia el difunto, ya que se dedicaba a trabajar en estas maquinarias.